REPORTE FRONTERA
Seth Rojas Molina
Lo novedoso en esta presentación, que no necesariamente implica que pudiera resultar efectiva, es la creación de 4 zonas en materia de seguridad que estarán a cargo de mandos militares y marinos y la “depuración completa de la Procuraduría del Estado”.
El anuncio del funcionario federal indica que se amplia y extiende el uso de la fuerza del estado en la entidad, a pesar de que se ha comprobado que no es la mejor herramienta para atender uno de los más graves problemas que padece la sociedad tamaulipeca.
Osorio Chong informó que esta “Estrategia de Seguridad Tamaulipas” comprende la asignación de más elementos federales y militares en el estado, tal como se describe en lo que denominaron “acciones inmediatas del Gobierno Federal”, para realizar operativos de vigilancia en los penales y más vigilancia en aeropuertos, puertos, aduanas y carreteras.
El secretario, anunció un “despliegue operativo en tramos carreteros” y patrullajes carreteros las 24 horas del día. ¿Qué diferencia existe entre estas dos acciones? Solo ellos lo saben.
Los antecedentes y resultados de medidas similares realizadas en la entidad todos los conocemos.
De poco ha servido la llegada de fuerzas federales a la entidad. Los operativos de vigilancia en comunidades con altos niveles de inseguridad no han modificado sustancialmente la situación que prevalece en esos lugares.
Por ejemplo a la fecha hay tramos carreteros que siguen siendo de alto riesgo.
La zonificación del estado recuerda una medida parecida que, sin soluciones de alto impacto, se llevó a cabo en el 2011.
Mediante un convenio de colaboración con el gobierno federal, el de Tamaulipas donó tres predios para el establecimiento de bases permanentes del ejército en los municipios de Jaumave, Mier y San Fernando.
Además, en agosto de ese mismo año, el gobierno local obtuvo la autorización para adquirir un crédito por hasta mil 500 millones de pesos que se usarían entre otras cosas para dotar de infraestructura básica a los predios mencionados así como para sueldos, viáticos y estímulos para los soldados que estarían acantonados en esas bases.
La justificación para esas donaciones y la contratación del crédito fue que eran indispensables para recuperar la tranquilidad de la población en algunas regiones asoladas por la inseguridad.
Menos de tres años después la situación local provocó esta reunión que congregó en Reynosa a los principales funcionarios del gobierno federal para dar a conocer la nueva “estrategia”
Lo resaltable del anuncio es el adelanto de una “depuración completa” de la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas.
Por cierto unas cuantas palabras que dicen mucho.