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Las redes sociales son un factor que puede incrementar las posibilidades de desarrollar un trastorno de la conducta alimentaria (TCA), pues a través de ellas es más fácil compararse con otras personas cercanas y aspirar a los estándares de belleza.

Durante el panel "Bullying y trastornos de alimentación", realizado dentro del Congreso Internacional de Pediatría, especialistas señalaron cómo los medios digitales ponen en mayor riesgo a niños y adolescentes de presentar un problema alimentario.

"Antes estábamos expuestos a televisión, a revistas y nos comparábamos un poquito más con personas del medio artístico, con gente más inalcanzable", señaló Laura Zavala, psiquiatra y terapeuta especialista en trastornos de la conducta alimentaria.

"El tema con las redes es que ya no nada más nos comparamos con personas inalcanzables, nos comparamos con nuestros pares, con personas iguales a nosotros".

Las redes, además, muestran imágenes modificadas con filtros, lo que hace que los ideales que se busca alcanzar en realidad son inalcanzables.

"Aparte de eso", añadió, "en las redes puedo recibir retroalimentación positiva o negativa. Todos estos factores van influyendo en esta presión".

Los TCA afectan los comportamientos alimentarios de una persona, así como su actitud con respecto a la comida y el aspecto físico, impactando su salud mental y física.

Entre los más comunes están la anorexia, la bulimia y el trastorno de comer por atracón.

La pediatra Cipatli Ayuzo mencionó que los TCA son la tercera enfermedad crónica más frecuente en los pacientes pediátricos y adolescentes.

Y la más mortal.

"Tanto en Instagram como en TikTok hay una advertencia de que los niños no deben usar redes sociales y, los adolescentes, bajo supervisión y con candados", mencionó la integrante de la Academia Mexicana de Pediatría.

"La recomendación es sentarte y escuchar a quién siguen. Preguntar: '¿qué entendiste de lo que dijeron?', '¿qué es lo que aprendiste?' y 'vamos a ir con un especialista o con una persona que sepa para que te pueda desmentir todas las cosas que pueden ver en redes sociales'".

Aunque este tipo de trastornos tienen diferentes causas, como genes, ambientes y estrés, las especialistas destacaron el papel que juega la presión social por cumplir ciertos cánones de belleza y de cómo debe ser un cuerpo.

Hace décadas, ejemplificaron, el ideal femenino era un cuerpo con más curvas porque se asociaba a la fertilidad, pero desde el siglo 19, es un cuerpo delgado.

"Lo que deberíamos de normalizar es que los cuerpos somos bien diversos, que venimos en todas las formas, en todas las tallas, en todos los pesos y en todos los colores", apuntó Zavala.

"Ésta es la norma, no tanto los estándares de belleza irreales que tratamos de perseguir todo el tiempo".

PREVENIR EN CASA

- Evitar discusiones a la hora de la comida.

- No premiar ni castigar con alimentos.

- Evitar palabras negativas relacionadas a la comida.

- Los niños no se ponen a dietas.

- No valorar a una persona según su cuerpo o imagen.