Gaza, Franja de Gaza
REFORMA /AGENCIAS
El Gabinete de guerra israelí autorizó la entrada diaria de dos camiones con combustible a la Franja de Gaza, para atender la petición de Estados Unidos y en medio de que Naciones Unidas anunció que se vio obligada a suspender el viernes las entregas de alimentos y otros artículos de primera necesidad en el enclave palestino.
"El Gabinete de guerra aprobó por unanimidad la entrada de dos camiones cisterna con combustible al día, para las necesidades de la ONU destinadas a apoyar las infraestructuras de agua y alcantarillado, a condición de que no les lleguen a Hamas", indicaron los responsables en un comunicado.
El combustible, según los funcionarios, se permitiría para el sistema de comunicaciones y los servicios de agua y alcantarillado de Gaza y tan solo representan aproximadamente entre el 2 y el 4 por ciento de las cantidades normales de combustible que entraban al enclave antes de que estallara la guerra el 7 de octubre.
Israel está bajo una creciente presión internacional, ya que la ONU advirtió esta semana que su labor de ayuda en el territorio palestino devastado por la guerra se estaba paralizando a medida que se agotaban las reservas de combustible.
Tel Aviv ha prohibido la entrada de combustible desde el inicio de la guerra, alegando que Hamas lo desviaría para fines militares. También ha prohibido alimentos, agua y otros suministros, excepto una pequeña ayuda procedente de Egipto que, según los trabajadores humanitarios, está muy por debajo de lo que se necesita.
El apagón de las comunicaciones, ahora en su segundo día, separa en gran medida a los 2.3 millones de habitantes de Gaza entre sí y con el mundo exterior, y paraliza la coordinación de la ayuda, que los grupos humanitarios ya estaban luchando por entregar debido a la escasez de combustible.
La agencia de la ONU para los refugiados palestinos, conocida como UNRWA, no pudo traer su convoy de ayuda el viernes, dijo su portavoz Juliette Touma.
"Un apagón prolongado significa una suspensión prolongada de nuestras operaciones humanitarias en la Franja de Gaza", afirmó Touma a The Associated Press.
Touma afirmó que el combustible, la comida, el agua y la asistencia humanitaria se están utilizando como un arma de guerra.
Gaza recibe ahora apenas el 10 por ciento del suministro de alimentos que necesita a diario y la deshidratación y la desnutrición aumentan entre los cerca de 2.3 millones de habitantes del territorio que necesitan comida, dijo Abeer Etefa, vocera para Oriente Medio del Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas.
"La gente enfrenta la posibilidad inmediata de morir de hambre", añadió la portavoz del PMA el jueves desde El Cairo.
Con pocos camiones entrando a Gaza y sin combustible para distribuir los alimentos, "no hay forma de satisfacer las necesidades actuales", apuntó.
"Los sistemas alimentarios existentes en Gaza están, básicamente, colapsados".