La tarde de hoy en Santander, España fue realmente significativa, pues no solamente Enrique Ponce decía adiós a esa afición que durante 30 tardes disfrutó de su toreo, sino que "Morante de la Puebla" volvía a los ruedos tras 47 días de inactividad. Crédito: Agencia/Reforma

Santander, España (23 julio 2024)

La tarde de hoy en Santander, España fue realmente significativa, pues no solamente Enrique Ponce decía adiós a esa afición que durante 30 tardes disfrutó de su toreo, sino que "Morante de la Puebla" volvía a los ruedos tras 47 días de inactividad debido a una enfermedad.

Y, como son figuras, los dos salieron en hombros tras cortar tres y dos orejas, respectivamente, además de que se les unió Fernando Adrián quien está aprovechando las oportunidades que le dio su triunfo en Madrid y que consiguió también cortar tres apéndices.

"Ha sido una de las tardes más importantes vividas en la temporada, porque cada uno de los tres toreros estuvo en su punto, aprovechando las condiciones del buen encierro de Domingo Hernández que permitió una corrida de esas que hacen afición", dijo Pedro Martínez, aficionado español, con cuatro décadas de seguir la fiesta en diferentes plazas.

Ponce pudo torear con esa personalidad y temple que le caracterizan, no exento de la emoción de su última corrida en esa plaza, consiguiendo la oreja de su primero y las dos del cuarto.

En ambos oyó un aviso.

Morante volvió con ese arte que es parte de su tauromaquia y logró dos actuaciones convincentes para el público que le valieron una oreja de cada uno de sus astados, mientras que Fernando Adrián consiguió las dos orejas de su primero y una, muy meritoria del sexto que lo revolcó feamente con el capote, pero después consiguió una faena intensa ante un astado emotivo.

La salida en hombros de los tres toreros, dos de ellos figuras y muy queridos por el público mexicano, fue un colofón a una tarde que marcará la temporada 2024 en España.