Ma. Teresa Medina Marroquín
Orbe
Nadie en sus cabales podrá negar que en México como en todo el orbe la causa de las convulsiones (“agitaciones de la vida pública”, señala el diccionario) son causadas, en su mayor parte, por la disputa del poder.
Las voces de alerta han venido dándose, al menos en este país, desde hace muchos años, cuando el PRI, luego coludido con el PAN, controlaba el antiguo centro político, y por ende económico, dejando sin alternativas a la oposición, básicamente de la izquierda.
Vinieron tiempos en que los escasos fondos de resistencia representados por Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo e Ifigenia Martínez, y otros gigantes de la izquierda, de pronto se multiplicaron; es decir, crecieron como el milagro de Cristo al hacer de unos pocos panes y peces una enorme cantidad de comida que sació el hambre de cinco mil personas, según los evangelios.
¿Qué hizo la oposición allá a finales de los 80 para multiplicar esos fondos de resistencia y ganarle a grandes pasos el poder a los presuntos representantes de la “Revolución”?
Sencillo: hicieron alianzas con el pueblo, a quien escucharon y llevaron sus exigencias a la arena política.
De ahí vino el discurso que finalmente llevó al poder en 2018 al tabasqueño Andrés Manuel López Obrador y ahora en 2024 a Claudia Sheinbaum Pardo.
¿Quiere la derecha mexicana ahora representada por el PAN volver al poder o al menos disputarlo con mejores resultados electorales?
También es sencillo: tiene que formar grandes alianzas con la sociedad y dejarse de litigios políticos, de distorsionados conceptos ideológicos y de discursos agresivos que sólo parecen encabezar a intereses empresariales y de clases pudientes, y no a los del pueblo.
“INICIATIVAS” DE ESCÁNDALO EN TAMAULIPAS Y LA OPCIÓN DE LA GUERRA
La tan debilitada oposición mexicana no está haciendo su trabajo, pues desde la comodidad de sus oficinas aspira a que el país voltee a tomarla en cuenta, sólo peleando en las cámaras de Diputados y de Senadores, como en las disminuidas representaciones que tienen en los 32 congresos locales, incluido Tamaulipas, donde las “iniciativas” de los panistas son las del escándalo y el protagonismo de películas de acción, cuando se encuentran inmovilizados en una crisis detonada por su distanciamiento con el pueblo.
Ignoran que el único camino hacia una moderna sociedad es un gobierno humanista como el que impulsa Américo Villarreal Anaya.
Lo otro es la regresión política donde a la gente sólo se le considere al final de los intereses políticos y equivaldría a una guerra, lo que sería no haber asimilado los mensajes que presentan los grandes cambios globales, incluido el cambio climático, la migración y un sinfín de situaciones ominosas como la violencia urbana y las amenazas de una Tercera Guerra Mundial.
CONSOLIDA LA UAT 57 AÑOS DE PRESTIGIO ACADÉMICO DE LA FACULTAD DE COMERCIO VICTORIA
El rector de la UAT, Dámaso Anaya Alvarado, expresó su reconocimiento a la Facultad de Comercio y Administración Victoria (FCAV) por consolidar 57 años de formar profesionales que han contribuido al desarrollo del estado.
Agradeció la presencia del secretario de Administración, Jesús Lavín Verástegui; así como de la contralora estatal, Norma Angélica Pedraza, y reafirmó la colaboración con el Gobierno del Estado.
Acompañado de la presidenta de Familia UAT, Isolda Rendón de Anaya, el rector felicitó a la comunidad del plantel universitario y dijo que, además de su fundación, que data de 1967, se celebra la consolidación de una historia de éxito, compromiso y constante transformación.
Posteriormente, Dámaso Anaya develó una placa por la remodelación de la cancha deportiva de la FCAV, y convivió con estudiantes de este plantel universitario.
¡Deseándoles un día maravilloso!
tessieprimera@hotmail.com , @columnaorbe, columnaorbe.wordpress.com