Aproximadamente el 30 por ciento de la población sufre de problemas digestivos, como dolores abdominales, flatulencias, diarreas y estreñimiento, y esto se debe a malos hábitos alimenticios combinados con una vida sedentaria, que provocan un metabolismo lento.

Al respecto, médicos especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Reynosa, Tamaulipas, dieron a conocer los beneficios que trae consigo una correcta digestión, que se da cuando se transforman los alimentos ingeridos en sustancias más sencillas, que son absorbidas a través del intestino delgado.

La doctora Araceli Magdalena García Hernández, Directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 33, explicó que este tipo de problemas estomacales amenazan constantemente el buen funcionamiento del aparato digestivo.

Para erradicarlos es necesario poner énfasis en los alimentos que se consumen diariamente, -aquellos que mejoran la flora intestinal que ayuda a la digestión-, y activarse físicamente de manera constante.

Detalló, que cuando se presenta una acumulación de flatulencias, puede deberse a tres causas: la ingesta de aire durante la deglución (paso del alimento de la boca a la faringe y luego al estómago), la formación de un exceso de gas en el intestino durante la digestión de los alimentos o bien, a patologías asociadas al aparato digestivo.

En los dos primeros casos indicó, “la flatulencia o eructos pueden corregirse cambiando la conducta alimentaria, como por ejemplo el estrés, que provoca que se coma muy aprisa, sin llegar a masticar los alimentos como es debido, en cambio, si se toma el tiempo necesario para comer, se tendrán mayores posibilidades de digerir los alimentos sin molestias”.

Además, recomendó hablar poco mientras se mastica, y evadir las gomas de mascar para evitar que entre aire al estómago.

En otros casos, añadió la directora de la UMF N° 33, la hinchazón del estómago es un síntoma a ciertas alteraciones o enfermedades, como el estreñimiento, la gastritis, la úlcera gástrica y el síndrome de intestino irritable, así como a intolerancias y alergias alimentarias.

Derivado de lo anterior, la doctora García Hernández exhortó a cuidar la flora intestinal con alimentos ricos en fibra, como verduras, legumbres, frutas y cereales integrales, beber abundantes líquidos después de comer, pero, si persisten las molestias, acudir con su médico familiar antes de automedicarse, ya que pueden complicar el cuadro clínico y requerir un tratamiento más fuerte y especializado.