El titular de la Agencia tercera del MP, informó sobre los hechos del fatal atropello.

El camión repartidor de gas que atropellara y matara a un menor de dos años en el Ejido Pedro J. Méndez, resulto ser de la empresa Gas San Diego con domicilio en Rio Bravo; en tanto el chofer anda libre pese haber sido detenido por el Comisariado de ese lugar sin saber que el pequeño había fallecido.
Por su parte titular de la Agencia tercera del Ministerio Público licenciado Jorge Carlos Sánchez Fernández, declaró que esa fiscalía se declarara incompetente para abrir una averiguación sobre ese delito calificado como Homicidio Culposo, pues aseveró que el ejido Pedro José Méndez ubicado a unos 80 kilómetros al sur de Reynosa, es ya jurisdicción de San Fernando.

Como se informó en su oportunidad, los trágicos hechos fueron en ese alejado ejido el domingo por la mañana, perdiendo la vida el pequeño Alejandro Ramírez Almanza de dos años y seis meses de edad, siendo atropellado por un camión Chevrolet propiedad de la empresa Gas San Diego con domicilio en Río Bravo.
El operador de la unidad y su ayudante, fueron detenidos por el Comisariado ejidal, sin embargo al no tener personal para retener y trasladar al chofer junto a su ayudante, los dejo en libertad.
Pero se estableció que el aviso a las autoridades fue alrededor de las 13:30 horas cuando el Fiscal Público Jorge Sánchez Fernández inició la investigación con auxilio de la Policía Federal y consiguieron asegurar el vehículo en la planta de “Gas San Diego” en Río Bravo, sin detenido.
El camión fue sometido a análisis de los peritos forenses, y a pesar de su desplazamiento de la escena del accidente a la ciudad en cuestión encontraron evidencia biológica en el “dibujo” de rodado y guarda fangos.
Finalmente el fiscal Sánchez Fernández no adelantó si procederá en contra del comisario ejidal y quienes conocieron de primera mano de la tragedia, incluso si son parientes del pequeño Alejandro cuyo tórax cara anterior quedó destrozado.