Reynosa  /  Sociedad
0
Votos
Nota Aburrida
Nota Interesante
Rezos y plegarias

Imagen Siguiente
Jornada de Oración de la Diócesis de Matamoros, Con disciplina y obediencia, la humanidad ha logrado superar las pandemias
domingo, 12 de julio de 2020
Por: Tania Castillo
Comparte esto en Facebook
Comparte esto en Twitter
Comparte esto en Digg
Enlarge Font
Decrease Font
Con ejemplos históricos, Obispo Eugenio Lira Rugarcía concientizó a la sociedad y llamó a comprometerse a seguir las medidas preventivas para lograr aplanar la curva de contagio de COVID-19


En la pasada Jornada de Oración por el fin de la pandemia que encabezó el Obispo de la Diócesis de Matamoros, Eugenio Lira Rugarcía; el clérigo utilizó ejemplos bíblicos e históricos para concientizar a quienes se sumaron a la transmisión virtual sobre las acciones que en su momento implementaron los santos para asistir a los enfermos y dar cristiana sepultura a los difuntos sin ser un foco de contagio para el resto de la población, medidas que hoy en días las autoridades sanitarias nos piden implementar, y que una buena parte de la sociedad aún está reacia a acatar.

En primera instancia, pidió para que la ciudadanía adquiera la cualidad de comprender el escenario que se vive a nivel mundial a fin de que tome las mejores decisiones, por su bien y el de la comunidad.

Posteriormente narró las vivencias de varios santos que ayudaron a combatir epidemias como la peste negra y la gripa española, desde el siglo III hasta la actualidad.

“Así lo han sabido hacer muchos a lo largo de la historia, incluso en momentos parecidos a los nuestros, porque lo que hoy vivimos no es nuevo, ha sucedido muchas veces a lo largo de la historia, en la que muchos cristianos han atendido a los enfermos y procurado una sepultura digna a los difuntos, convencidos de que, como decía San Cipriano que vivió la peste en el siglo III; peor que la peste, es el abandono a los enfermos y el despojo de los muertos”.

“Haz que sigamos el ejemplo de San Carlos Borromeo que durante la peste en Milán en el siglo XVI además de atender a los enfermos, para no transmitir la enfermedad mantenía sana distancia, se cambiaba frecuentemente y lavaba su ropa en agua hirviendo, purificaba lo que tocaba con fuego y una esponja empapada en vinagre que llevaba siempre consigo, y guardaba en frascos con vinagre la limosna que repartía”.

Destacó la implementación del concepto de cuarentena, de sana distancia y de la suspensión de actividades que favorecían las aglomeraciones, así como el uso del ingenio para realizar las celebraciones religiosas sin exponer a los creyentes, tal y como se pide en medio de la pandemia por COVID-19.

“Durante la gran peste de Milán, para detener el contagio, San Carlos Borromeo además de ordenar a los sacerdotes quedarse en casa, excepto a los que servían a los enfermos, propuso que todos guardaran cuarentena, idea que el tribunal de la ciudad decretó para todos los milaneses, y para que el pueblo permaneciera en sus domicilios, dispuso que en los cruces de la ciudad se colocaran crucifijos y altares para que se celebraran ahí las misas y los fieles pudieran participar desde sus ventanas… ahora a través de los medios de comunicación como nuevas ventanas nos has permitido seguir escuchando tu palabra”.

El Obispo, pidió a Dios para que los fieles logren sacar lo mejor de sí, y que aquellos que tienen la posibilidad, ofrezcan su trabajo, su tiempo y sus recursos para apoyar a quienes además del temor al contagio están sufriendo por la pérdida de su trabajo y por la escasez de comida.

“El drama que estamos atravesando nos obliga a tomar en serio lo que cuentan, a no perdernos en cosas insignificantes, a redescubrir que la vida no sirve si no se sirve… que en estos momentos tan difíciles en los que la familia y muchos necesitan de nosotros, como María nuestra madre, seamos capaces de dar lo mejor de nosotros y les compartamos la seguridad de la fe, la fortaleza del amor y el aliento de la esperanza”.

Así mismo, Lira Rugarcía oró solicitando que la comunidad sea realista y se comprometa a cumplir con las medidas preventivas dictadas por las autoridades sanitarias, y que crean que al igual que en el pasado, la disciplina y obediencia serán las cualidades que permitirán aplanar la curva de contagio de COVID-19 y darán a la humanidad la oportunidad de vencer una nueva epidemia.

“Ayúdanos Señor, a ser realistas, responsables y solidarios, que procurando cuidar de nosotros y de los demás usemos cubrebocas, nos lavemos frecuentemente las manos con agua y jabón o gel con alcohol, guardemos sana distancia, y si es posible nos quedemos en casa… haz que confiando en esta promesa demos lo mejor de nosotros, que nada nos retrase, que nada nos haga retroceder, haz que sigamos adelante”.

 

Opina sobre este artículo

Nombre   Email  
Título
Opinion

Otras Noticias