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Pbro Miqueas Cantú Garza

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El agente que echa a volar la imaginación… El niño o la niña

domingo, 3 de mayo de 2015
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El novelista inglés, Henry Graham Greene escribe: El mejor olor, el del pan; el mejor sabor, el de la sal; el mejor amor, el de los niños.

El niño, es un acontecimiento admirable. Los padres muestran alegría, abnegación, amor y cada día se acentúa el compromiso de conducirlo en un crecimiento sano y sorpresivo.

El patriarca Isaác y su esposa Rebeca estaban encantados de sus gemelos; leemos en Génesis 25:27 “Y crecieron los niños”. Crecieron con ideales, sueños, anhelos, e inclinaciones diferentes que propiciación que lo padres perdieran la armonía y se armara un conflicto entre ellos.

La minusvaloración del niño a través de las edades, arrebata su vida. Existe miles y miles de padres y maestros que velan por sus hijos.

Por ejemplo: El niño Moisés, fue amenazado de muerte por faraón; los padres hebréos al salir de Egipto se mostraron determinados al decir: deja ir nosotros y a nuestros hijos.

En los tiempos bíblicos; se dio un decreto para matar al niño Jesús. Jesús da una declaración defensiva, duradera, distintiva y dominante: “dejad que los niños vengan a mí y no los estorbéis porque de ellos es el reino de Dios:
El niño no solo debe crecer en lo físico; es importante impulsar y cooperar para que su imaginación sea una realidad.

Antonio Mello expresó: los niños son espejos; en presencia del amor reflejan amor; cuando no hay amor, no tienen nada que reflejar. La conciencia de los grandes requiere entender que los niños necesitan ser amados; aunque a ellos les gustan las gaseosas, dulces y pastel… pero ser valorados al nivel del adulto, es su máximo.

Sin afán de molestar, actualmente la sociedad realiza fiestas para fomentar la alegría amistosamente; sin embargo son tajantes en negar la entrada a los niños.

Todo padre cuerdo de corazón sabe que el niño es el maestro de los padres. Los niños son la esperanza del mundo; por ello, necesitamos orar como Esdras, solicitando el camino derecho para nosotros y para nuestros hijos Esdras 8:21.

El niño y la niña poseen imaginación, inspiración, influencia, innovación, autenticidad, pasión, y aunque las cosas que se imaginan estén lejos o sean imposibles, ellos la tienen en sus manos.

El novelista francés Víctor Hugo dijo algo más celebre todavía: imaginación e inspiración son casi la misma cosa. Felicidades a todos los niños!!!

 

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