Relacionado
-
Seis básicos para verte atractiva (28/08/2016)
-
El flequillo, rey absoluto (24/07/2016)
-
Por una retaguardia sobresaliente (01/07/2016)
-
No escondas los pies (30/06/2016)
-
La energía se convierte en belleza (02/06/2016)
-
El coco, aliado de la belleza (30/05/2016)
-
Higiene facial, clave de una piel sana (23/05/2016)
Si te has dado cuenta que el daño no vale la pena, te aseguramos que tienes más opciones.
Ponte una diadema elástica en la cabeza y ve enrollando secciones pequeñas de tu cabello, dentro de la diadema.
Como tu cabello estará mojado, a la mañana siguiente tendrá una forma diferente.
Sólo necesitas un poco de agua y mousse para esta técnica.
Empieza con una melena completamente seca y luego remoja con agua la mitad inferior de tu melena. Aplica mousse a la parte húmeda de tu cabello y distribuye equitativamente con tu cepillo (o peine).
Para terminar, enrolla tu cabello en un chongo y, después de unas horas, podrás disfrutar de unas lindas ondas.
Para unos rizos más definidos, necesitas algo más drástico.
Humedece tu cabello y divídelo en secciones. Cada pedazo, debes enrollarlo perfectamente y sujetarlo a tu cuero cabelludo con un pasador. Puedes irte a dormir de esta forma o cubrir tu melena con una gorra de baño para despertar con unos rizos naturales.
Si buscas unas ondas naturales y elegantes, te recomendamos trenzar tu cabello. En caso de que sólo necesites un poco de volumen y movimiento, hazte una trenza suelta.
Si quieres ondas firmes, péinate de dos trenzas francesas. Entre más pequeñas sean las trenzas, más firmes serán las ondas.
¿Quieres ondas de mar? Combina media taza de agua tibia, una cucharada de sal de mar, una de aceite de coco, una de gel y coloca la mezcla en un atomizador.
Esta receta te dará las ondas que necesites y hasta a un poco de volumen.