Fotografía facilitada por Iran Theater que muestra a los titiriteros españoles Marcos Ptt y Ezra Moreno durante la presentación ayer en Teherán de su espectáculo "El Retrete Cabarete", en el marco del XV Festival Internacional de Marionetas Teherán Mubarak., en el que participan compañías de nueve países, entre ellos China, Holanda, Irak y España. EFE

En una sala llena la pareja formada por el gallego Marcos Ptt y Ezra Moreno levantaron anoche largos aplausos y, sobre todo, muchas carcajadas entre un público mayoritariamente joven y ansioso de conocer cosas nuevas y disfrutar de la oportunidad de ver artistas extranjeros.

Con la magia de sus manos, unos sencillos globos y el poder de la iluminación y la música compartieron con la audiencia una historia de amor ("Ne me quitte pas"), un alocado baile de rock and roll, una sorprendente danza de bolas y un juego de castañuelas y claqué que repetirán esta noche, en la última sesión del festival.

"Es una selección de números musicales, de divertimento sin barrera idiomática, una especie de grandes éxitos de la compañía", que tiene casi diez años a sus espaldas y ha llevado sus espectáculos a lugares como Francia, Bélgica, Rumanía o Portugal, explica a Efe Ezra.

Los dos artistas han quedado sorprendidos de la "acogida fabulosa" que han tenido en Irán, no solo con su público, sino también en su contacto con la gente.

"Ver a toda esta gente que se emociona viendo tu espectáculo, para los que es especialmente transcendente lo que haces y que te trata con un enorme respeto te hace sentir que lo que haces sirve para algo", dice Marcos, que destaca la "gran curiosidad y enormes ganas" que hay en Irán de conocer lo que se hace fuera en el ámbito artístico.

"Creo que aprecian especialmente a los extranjeros que vienen respetándoles y para conocerles, porque son conscientes de la satanización que existe de su país", añade.

Tras cada sesión, los artistas pasan largo rato hablando con su público, deseoso de hacerse fotos con ellos, felicitarlos y preguntarles qué les parece Irán.

Ambos y el técnico que les acompaña, Antonio 4Caminos, han tenido también la oportunidad de ver el trabajo de compañías de títeres iraníes y destacan que en el país hay "mucha calidad, conocimiento del medio y limpieza en el lenguaje teatral".

"No es un público que se contente fácilmente", dice Marcos, y añade que en Irán hay "una ebullición de creación bastante grande" que apenas se conoce fuera.

El festival se celebra cada dos años desde 1989 y fue el primer festival internacional que se celebró en el país tras la Revolución Islámica de 1979.

Este año han conseguido un gran logro, traer una compañía del "archi-enemigo" EEUU, algo que no ocurría desde hace más de una década, dice a Efe la directora artística y directora de cine, Marzieh Baroumand.

"En Irán tenemos cuatro universidades en las que se imparten técnicas de títeres. Hay mucha tradición y cada festival tiene una gran respuesta" añade, y recuerda que este es el país con mayor número de afiliados a la Asociación Internacional de Marionetas (UNIMA).

Baroumand destaca que "la oportunidad de diálogo cultural" que crea este evento "es muy rica, especialmente para las audiencias profesionales" y agrega con satisfacción que, cada noche, unas 6.000 personas acuden a ver alguno de los más de cuarenta espectáculos que componen el festival.