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“Viva (el) rock&roll, viva Kiss, viva México”, externó Paul Stanley (vocalista de Kiss) en un español limitado, pero que produjo una euforia total entre los amantes del heavy metal que acudieron al Autódromo Hermanos Rodríguez para celebrar la cuarta edición del encuentro metalero (primera en DF).
El foro capitalino se llenó de sonidos duros desde el mediodía del sábado, muchas horas antes de que Gene Simmons (bajista, vocal y demonio de la banda estadunidense) sacara su larga lengua llena de sangre (artificial), antes de que produjera una antorcha de fuego con una espada o de que se elevara hasta lo más alto del escenario en toda una de las canciones.
A diferencia de la intensa lluvia que cayó en el Corona Capital (dos semanas antes en ese mismo recinto), el Hell&Heaven recibió intensos rayos solares, los cuales hicieron que muchos jóvenes se despojaran de sus playeras negras y algunas chicas lucieran en diminutos shorts.
El menú rockero incluyó más de 70 bandas distribuidas en cinco escenarios, entre las que destacaron UDO y la presencia de su vocalista y líder Udo Dirkshneider; un Limp Bizkit que se dio tiempo de recordar el clásico de Nirvana “Smells Like Teen Spirit”, o la furia de Korn y Rob Zombie, que emocionó a los amantes del nu metal.
Ni los problemas de audio que se registraron en los escenarios mermaron el buen ánimo en el lugar. Aunque sí existieron comentarios sobre el bajo volumen en escenarios como el Hell Stage o el Heaven Stage (los dos principales).
El H&H también presentó a bandas mexicanos como Agora, Dirty Woman, Maligno, Transmetal, Next, Orka, Mystica Girls, Salvador y los Eones, Alaydha, Ángeles y Demonios, Sekta Core, Draksen o Leprosy, tanto en los escenarios principales como en los alternos True Metal Stage, Foro Norte Stage y New Blood Stage.
Personajes medievales o en zancos, juegos mecánicos, muchos litros de cerveza que hicieron tambalear a fans y la imagen del evento en gigante (la figura de una persona con una máscara de gas, que servía para que los asistentes se tomaran la foto del recuerdo), fue parte de lo que se vivió en una jornada que culminó con los acordes de “Rock and Roll All Nite”, entre fuegos pirotécnicos, ya en la madrugada del domingo.